Avery O'Hara || ID

Edad: 24 años
Grupo: Bailarinas
Nacionalidad: Estadounidense
Cumpleaños: 14 de Marzo
~~~~~~~~~~~~~~
- La música
- Leer
- A veces escribir
~~~~~~~~~~~~~~
- La gente que la juzga
- Que toquen lo que es suyo
-

Avery es delgada pero a la vez es menuda, no es una persona que destaque demasiado por su altura mide más o menos un metro sesenta. Su pelo es un rojo, tiene algunos rizos, más bien ondulaciones por lo que se le hace bastante difícil peinarse. Tiene unos ojos que podrían hipnotizar a cualquiera, tiene un color entre verde y azul. Tiene una sonrisa casi perfecta, pues tiene algún que otro diente fuera de sitio pero no por eso su sonrisa deja de ser bonita. Tiene un tatuaje en el hombro derecho, es símbolo que desde que lo vio se enamoró de el. Después tiene otro en la espalda por la parte superior derecha que es una ''N'' del nombre de su madre, Nina. Y por último tiene otro en el gemelo izquierdo, se trata de un duende con alas que está sentado. Puede que para muchos no signifiquen nada pero para ella significan demasiado.

Es una de esas chicas con el “Ya voy” en la boca, pero la verdad es que nunca acude a la primera ni a la segunda, tal vez ni a la tercera. Efectivamente, es perezosa. Puede que tenga el propósito de ayudarte si se lo pides y esto esta a su alcance, pero la realidad es otra, lo dejará para el último momento si no se le olvida antes y te pedirá disculpas. Ya esta, no intentes presionarla para que lo haga ya que lo hará menos que antes.
Utiliza tanto el sarcasmo y la ironía que se ha convertido en una costumbre diaria, pero con sus seres queridos es un trozo de pan que habla bien y actúa como es debido, aunque ha veces lo haga con un poco de, digamos, simpatía y a lo mejor se descontrole un poco y llegue a resultar hiriente. Es un poco antipática cuando quiere, descarada y tal vez puede mostrase mal educada. No es muy entregada al amor ya que es muy sensible y casi siempre sale muy dolida de las relaciones; y eso es lo último que se le desea a una chica como ella, aunque si la prueba de amor le convence se entregara a sus brazos sin pensarlo dos veces.

Avery nació en Matrah. Su madre era una prostituta y su padre un narcotraficante. Se podría decir que ella no se ha criado de la manera más correcta. Desde que era pequeña se metía en problemas con la policía aunque estos no le hacían nada por el hecho de ser una niña pequeña. Cuando ingresó en el colegio sus padres no se preocupaban ni por ella ni por sus estudios. Siempre suspendía todas las materias incluidas las más fáciles, sus profesores se preocupaban por ella pero Avery pasaba tanto de ellos como de sus padres. A medida que fue creciendo se fue dando cuenta de que llegará un momento en el que estará sola y tendrá que valerse por si misma, pero, ¿Qué hacer en una ciudad como esa? Lo único que se le ocurría era ser como su madre pero no quería ser así; no quería acabar como su madre. La otra opción que se le ocurría era ser bailarina del burdel. No se le daba demasiado bien la danza pero eso era lo que menos importaba. Con el dinero que ganaba conseguía mantenerse y con eso le bastaba.